sábado, 3 de septiembre de 2011

Empezar otro libro

Lo más lindo de una pelea es la reconciliación. Ese momento en que te estas arreglando y pensas "La falta que me estuviste haciendo todo este tiempo", en este tiempo me amigué con dos personas que sinceramente fueron fundamentales en mi vida aunque no lo quiera aceptar. Con ambas pasé inolvidables momentos: con mi amiga o compañera, no sé qué seremos ahora, salí muchas veces a comer, a pasear, ibamos una a la casa de la otra y todas esas cosas que hacen las chicas, pero bueno un día las cosas se fueron como apagando por razones que no voy a explicar por acá. Solucionamos una o dos veces el problema, pero nada fue igual. Espero que esta vez de a poco logremos llegar a lo de antes y aunque las cicatrices quedan, que nunca nunca nunca se vuelvan a abrir. Y la segunda persona, es un amigo o... conocido, no tengo idea, creo que la cosa sigue floja, pero no me voy a cansar de hablarle, de querer ser como antes, voy a ocuparme todo lo que sea necesario, porque sé que amigos como él ya ni hay. Y la verdad que me hizo alegrar muchas veces en las que no podía ni sonreir forsadamente.
Espero que pueda ser todo como antes, supongo que más adelante contaré como viene la cosa.

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