Suelo ser una persona extremadamente sensible, la mínima cosa me pone mal. Soy por así decirlo, muy cuidadosa con mi cuerpo, me gusta arreglarme en lo que entraría maquillarme, plancharme el pelo y usar ropa que me favoresca, no me gusta engordar y hago ejercicio para mantenerme en forma (ya me fui por las ramas como siempre). Me molesta, me pone triste que pasen cosas negativas conmigo, me hace sentir mal, no quiero tener estravismo y usar lentes, no quiero tener escoliosis y tener que empezar natación a la fuerza, no quiero ir al dentista y que me diga que consulte un ortodoncista porque cree que necesito aparatos, no quiero no poder tomar aspirina (con lo ricas que son) porque me bajarían las plaquetas y volvería a pasar lo mismo que ya paso hace unos años...
Pero... me puse a pensar y reflexionar las chiquilinadas por las cuales me quejo y hago escándalo y la verdad que son cosas mínimas (excepto la última). Esto me lo hizo pensar porque hace unos días ví una película llamada "La desición más difícil" que trata de una nena con leucemia, y debido a eso me siento como una tarada poniendome mal por cosas que tienen arreglo; no hay problema que no tenga solución excepto la muerte.
Personas con enfermedades graves, a veces incurables y yo haciendo barullo por no querer usar aparatos porque me voy a ver horrible y más de lo que soy. Tiene solución: en unos años me los tendrán que sacar y voy a tener bien lindos los dientes. También me quejo por usar lentes, y bueno después sino se me corrige me operan y creo que no hay ningún riesgo en eso. Además de quejarme por las aspirinas, no me molesta no poder comerlas o siempre tener que recurrir al ibupirac, me pone mal en cierto modo lo que me pasó, que nunca caí en lo que tenía, para mi era.... no sé, un paseo estar internada en el hospital y dar vueltas por ahí, sin contar que me regalaban lindos peluches, golosinas, películas y que gracias a mis primos pude llenar el álbum de HSM (lo emocionada que estaba cuando vi que me faltaba una sola figurita). También al ver esa película me hizo revolver recuerdos, pensar cuando los doctores hablaban con mis papás y yo no entendía la razón por la cual lloraban, claro que lo que tenía es mil millones de veces menos grave que lo que padecía la nena de la película. A veces pienso que hasta que algo no te pasa no te das cuenta de que podes dar un paso en falso y caerte para siempre y nunca jamás levantarte, por si no se entiende, más claro: ir a dormir con los peces. Y son esas cosas las que te ponen mal pero te dan ganas de vivir y aprovechar todo de decir "No sé que me va a pasar mañana", lo que siempre les digo a mis amigas "Hacelo porque no sabes si mañana te pisa un auto y estas muerta" Sí hermoso mi consejo, pero es la verdad, solo El de Arriba lo sabe.
[Sé que me volví a ir por las ramas, pero aunque el mensaje sea medio confuso sé que por ahí está.]
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